
CaixaForum Madrid dedica una exposición a Henri Matisse (1869-1954), con obras de todas las épocas en diálogo con grandes figuras del arte del siglo XX y con una selección de artistas contemporáneos que le rinden homenaje. Fruto de la colaboración entre el Centre Pompidou y la Fundación ”la Caixa”, la muestra incluye 46 obras de Matisse y 49 de otros artistas en un juego de referencias cruzadas que ilumina un siglo de creación y vanguardia. Además, la exposición contará con un ciclo de actividades para expandir la experiencia de los visitantes.
La directora de CaixaForum Madrid, Isabel Fuentes, y la comisaria y conservadora jefa de las Colecciones modernas del Musée national d’art moderne - Centre Pompidou, Aurélie Verdier, han presentado la exposición Chez Matisse. El legado de una nueva pintura.

![August Macke, «Lautenspielerin» [Mujer tocando el laúd], 1910. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 4348 P.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_414_626/uploads/2025/10/23/68f9f1b8ac0b7.jpeg)
La exposición dedicada a Matisse, la primera del segundo gran acuerdo estratégico renovado por la Fundación ”la Caixa” y el Centre Pompidou de París para organizar muestras de forma conjunta, se podrá visitar en CaixaForum Madrid del 28 octubre de 2025 al 22 de febrero de 2026. A partir del 26 de marzo y hasta el 16 de agosto de 2026 permanecerá en CaixaForum Barcelona.
Hacia 1900, la obra de Matisse revolucionó la pintura europea con una idea explosiva del color. En los años cincuenta, sus collages transformaron la idea del espacio pictórico. Entre esos dos momentos transcurrieron más de cincuenta años de investigaciones plásticas que convirtieron la obra de Matisse en la casa del arte moderno, frecuentada por artistas de distintas generaciones y tendencias. De ahí el título, Chez Matisse, que pone el acento en la hospitalidad y la complicidad del maestro.
Primitivo y sofisticado, clásico y salvaje, figurativo y abstracto, Henri Matisse (1869-1954) es una figura clave de la modernidad, capaz de atraer a un público diverso y deslumbrar a otros artistas, que lo consideran una referencia y un compañero de investigaciones plásticas.

![Natalia Goncharova, «Nature morte au homard» [Naturaleza muerta con bogavante], 1909-1910. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 81-65-857.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_414_233/uploads/2025/10/23/68f9f1ab5875f.jpeg)
![Alexej Von Jawlensky, «Byzantinerin (Helle Lippen)» [Bizantina (Labios claros)], 1913. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 1982-44.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_414_233/uploads/2025/10/23/68f9f18ca9723.jpeg)
Chez Matisse. El legado de una nueva pintura presenta obras de Pierre Bonnard, Georges Braque, Daniel Buren, Robert Delaunay, André Derain, Ernst Ludwig Kirchner, František Kupka, Mijaíl F. Lariónov, Le Corbusier, Jacques Lipchitz, Albert Marquet, Barnett Newman, Emil Nolde, Picasso, Kees van Dongen y Maurice de Vlaminck, entre otros.
Una de las curiosidades que propone la muestra es la introducción de la mirada femenina a través de la obra de Sonia Delaunay, Françoise Gilot, Natalia Goncharova, Baya [Fatma Haddad],Anna-Eva Bergman y Zoulikha Bouabdellah, que introducen una reflexión sobre el arte decorativo, los límites de la pintura y el lugar de lo femenino.
¿Por qué figura Matisse en el panteón de la historia del arte moderno? Por su conocimiento de los artistas más innovadores del siglo XIX y por su capacidad de aportar nuevos signos para su tiempo. Nacido en una familia de tejedores y comerciantes de pigmentos, la obra de Matisse es fruto de un trabajo constante que le permite alcanzar un complejo dominio de la simplicidad.
Su concepción innovadora del color y su reformulación crítica del cuadro como superficie pictórica tuvieron rápidamente eco entre los fauves alemanes y los neoprimitivistas rusos, así como en la pintura estadounidense de la década de 1940. Su obra es el reflejo de su tiempo: desde la angustia y la introspección de los años de guerra, hasta la explosión de sensualidad y hedonismo de sus pinturas y collages de madurez.

Ocho apartados exploran
cronológicamente la obra de Matisse
La exposición se divide en ocho apartados ordenados cronológicamente que despliegan la obra de Matisse y muestran su influencia sobre los artistas de los siglos XX y XXI.
- Línea y color (1900-1906)
![Le Corbusier (Charles-Édouard Jeanneret), «Métamorphose du violon» [Metamorfosis del violín], 1920-1952. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 3342 P.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_414_626/uploads/2025/10/23/68f9f1782d2a5.jpeg)
Un autorretrato, un paisaje de París y dos bodegones reposados y sombríos, realizados entre 1900 y 1902, son el testimonio de los inicios de la trayectoria de Matisse bajo la influencia de su maestro, Gustave Moreau. Lujo, calma y voluptuosidad, de 1904, representa un cambio de rumbo, con un tratamiento plástico basado en la fragmentación de la luz y la correspondencia entre el tema —un almuerzo junto al mar— y la belleza de la forma.
En contacto con los paisajes de Saint-Tropez y Colliure, la paleta de Matisse se vuelve incandescente. Albert Marquet, André Derain, Maurice de Vlaminck, Georges Braque y Robert y Sonia Delaunay forman parte de la misma revolución.
- Primitivismos o la emoción (1907-1913)
El descubrimiento de las artes no occidentales y el primitivismo permiten a Matisse enfrentarse al canon establecido. En este apartado se presentan sus esculturas de 1907-1930 confrontadas a L’Enlèvement d’Europe [El Rapto de Europa], una obra de Jacques Lipchitz de 1938. Matisse conecta con las vanguardias alemana y rusa, atraídas también por el arte primitivo.
Como sus contemporáneos alemanes —Ernest Ludwig Kirchner y Emil Nolde—, busca un fundamento emocional para el arte. En Rusia, la obra de Matisse se expone junto a los cuadros de Mijaíl F. Lariónov y Natalia Goncharova, que se inspiran en la imaginería popular.
- Provocar apariciones (1914-1917)
En los años de la Primera Guerra Mundial, la paleta vuelve a la oscuridad. Matisse define un espacio íntimo e incorpora el motivo de la puerta y la ventana, umbral de un mundo inquietante, que encuentra un eco en la obra de la misma época de Kees Van Dongen y František Kupka. Durante las sesiones de posado, Matisse busca establecer un vínculo empático y plasmar el flujo de energía entre artista y modelo. En los retratos de la actriz Greta Prozor de 1916 y del coleccionista Auguste Pellerin de 1917, la figura humana aparece rodeada de un halo fantasmal.

![Henri Matisse, «Intérieur, bocal de poissons rouges» [Interior con pecera], primavera de 1914. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 4311 P.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_414_233/uploads/2025/10/23/68f9f1934dfb6.jpeg)

- Abstraerse
(1914-1917)
Durante la irrupción del cubismo en 1908, Matisse se convierte en testigo privilegiado y punto de encuentro para la vanguardia parisina al recibir en su hogar a destacados artistas del momento. En agosto de 1914, mientras reside en Colliure, crea Porte-fenêtre à Collioure [Puerta-ventana en Colliure], una obra clave que, aunque inacabada, marca su primer acercamiento al concepto de «negro luz» utilizando planos cromáticos intensos que anticipan nuevos caminos en su pintura.
Este enfoque influyó tanto en la evolución formal de František Kupka, con sus composiciones de bandas verticales y aspiraciones abstractas, como en su propia obra, ejemplificada en el retrato de su hija Marguerite, donde la estructura ortogonal cubista se funde con un aura de misterio estilístico.
- ‘Nuestro corazón mira hacia el sur’ (1917-1929)
A finales de 1917, Matisse se traslada a Niza, en la Costa Azul. Deja de lado la dimensión experimental y se concentra en escenas de interior con modelos femeninos que le permiten explorar la relación entre figura y espacio. Figuras y accesorios remiten a sus viajes a España y al Magreb.
Como en el caso de Albert Marquet y Kees van Dongen, la luz mediterránea acelera la renovación de las soluciones plásticas. Matisse y Natalia Goncharova (que descubre España en 1916) coinciden al presentar el arquetipo de la mujer con mantilla —hierática y decorativa— como un icono contemporáneo.
- Modernidades clásicas. Matisse y su dialogo con
Bonnard, Gilot y Picasso (1930-1938)
En la década de 1930, Matisse viaja a Estados Unidos y a Oceanía. Simplifica el dibujo y lo despliega en el espacio. En esta sección se confronta un bodegón de Matisse, Nature morte au buffet vert [Naturaleza muerta con aparador verde], de 1928, con Naturaleza muerta con candelero, de Picasso, de 1944, y Évier et tomates [Fregadero y tomates], de Françoise Gilot, de 1951, para mostrar la influencia de Matisse sobre la pareja de artistas y evidenciar las diferencias: Gilot comparte la empatía de Matisse hacia los objetos, mientras que Picasso impone su propia personalidad. En 1936, Matisse sufre un bloqueo creativo y vuelve a Cézanne y Bonnard para resolver su dilema de qué hacer con la figura.
- Días de color. Pintura y película a partir de 1939
Desde 1936, Matisse utiliza papeles pintados con gouache en portadas de revistas. En el libro Jazz, de 1947, esta técnica adquiere una autonomía propia. Matisse propone una salida al viejo conflicto entre línea y color. Recorta el color y consigue una forma depurada hasta lo esencial.
En 1951 colabora con Le Corbusier en la Capilla del Rosario de Vence, en la Costa Azul. Matisse es una referencia para pintores abstractos norteamericanos, como Barnett Newman.
En Francia, Raymond Hains y Jacques Villeglé buscan superar la pintura y ponen a Matisse en movimiento en su película Pénélope (1950-1980). También vemos que las composiciones de la artista autodidacta argelina Baya recuerdan la fuerza decorativa del pintor.
![Henri Matisse, Porte-fenêtre à Collioure [Puerta-ventana en Collioure], septiembre-octubre de 1914. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 1983-508.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_414_233/uploads/2025/10/23/68f9f195be3ed.jpeg)
![Barnett Newman, «Not There–Here» [No allí-aquí], 1962. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 1988-1166.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_414_233/uploads/2025/10/23/68f9f1a2a879e.jpeg)
![Daniel Buren, «Peinture aux formes indéfinies» [Pintura de formas indefinidas], mayo de 1966. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 1986-255.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_414_233/uploads/2025/10/23/68f9f1a906019.jpeg)
- ‘Chez Matisse’. Horizontes múltiples (1961-1970)
En 1961, la exposición Henri Matisse. Les grandes gouaches découpées, del Museo de Artes Decorativas de París, pone en contacto la obra de Matisse con los jóvenes artistas Daniel Buren y Michel Parmentier, que descubren la técnica del collage y la importancia del blanco del soporte como elemento activo de la composición. Su enfoque conceptual excluye los valores emocionales y subjetivos de Matisse.
La exposición se cierra con una reflexión sobre el papel de la obra de Matisse como inspiración de la nueva modernidad, el arte pop y las formas poscoloniales en la pintura, el vídeo y el cine. En este apartado destaca la obra de la videoartista rusa de origen argelino Zoulikha Bouabdellah.
Lo decorativo
«Lo decorativo es algo extremadamente valioso para una obra de arte. Es una cualidad esencial. No es peyorativo decir que las pinturas de un artista son decorativas. […] La esencia del arte moderno es formar parte de nuestra vida. Un cuadro en un interior propaga a su alrededor, a través de los colores, una alegría que nos aligera», declaró Matisse en una entrevista en 1945.
La exposición muestra el valor de lo decorativo en contacto con la obra de la artista rusa Natalia Goncharova. «¿La pintura decorativa? La poesía poética. La música musical. Es absurdo. Toda pintura es decorativa, dado que decora, que colorea, que embellece. Y respecto a las cosas que son solo decorativas, la verdad es que no conozco ninguna», escribió la gran poeta rusa Marina Tsvetaieva a propósito de Goncharova.
Belleza y desnudo
¿Cómo enfrentarnos desde una perspectiva actual a los cuadros de odaliscas desnudas que Matisse pintó en diferentes momentos de su obra? Matisse reflexionó sobre el desnudo y lo liberó del yugo de la belleza y de los cánones impuestos. Presentó un cuerpo que no es la encarnación de lo bello: un cuerpo abstracto.
En palabras de la artista Zoulikha Bouabdellah, los desnudos de Matisse «nos otorgan un poder que debemos aprovechar, el de someterlos a la prueba de nuestros cuestionamientos: ¿no es reduccionista ver en la representación del cuerpo femenino desnudo una simple ofrenda a los deseos masculinos? ¿Negarse a ver esos cuerpos no es acaso encerrarlos por segunda vez?».
La enfermedad
En los últimos años de su vida, Matisse se vio obligado a abandonar los pinceles. Esta contrariedad estimuló su instinto artístico. Algunas de sus creaciones del último periodo, elaboradas con papeles pintados y recortados, son obras clásicas del arte del siglo XX. Su influencia se extiende más allá del mundo del arte: son obras icónicas, objeto de innumerables imitaciones y usos comerciales. Matisse construyó, a partir de la privación y el dolor, un mundo luminoso.
![Raymond Hains, «Film abstrait» [Filme abstracto], 1952-1976. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 1977-619.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_414_239/uploads/2025/10/23/68f9f1a4a0f47.jpeg)
Mediación
La exposición cuenta con un espacio de mediación que invita a los visitantes a adentrarse en el ambiente de los talleres de los artistas. En sus últimos años, Matisse trabajó con recortes de papeles pintados por él mismo diseminados por las paredes de su estudio, muchas veces como paso previo a obras murales.
Otros artistas presentes en Chez Matisse. El legado de una nueva pintura han trabajado también en telas de gran formato o directamente sobre el muro de sus talleres, donde pasan muchas horas y que acaban convirtiéndose en parte de su obra.
En este espacio se recrea un estudio colectivo donde los visitantes pueden inspirarse en las obras de Matisse y de los artistas presentes en la exposición, como Daniel Buren o Shirley Jaffe, para realizar sus propias composiciones.







![Natalia Goncharova, «Nature morte au homard» [Naturaleza muerta con bogavante], 1909-1910. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 81-65-857.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_340_340/uploads/2025/10/23/68f9f1ab5875f.jpeg)
![Alexej Von Jawlensky, «Byzantinerin (Helle Lippen)» [Bizantina (Labios claros)], 1913. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 1982-44.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_340_340/uploads/2025/10/23/68f9f18ca9723.jpeg)
![Henri Matisse, «Intérieur, bocal de poissons rouges» [Interior con pecera], primavera de 1914. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 4311 P.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_340_340/uploads/2025/10/23/68f9f1934dfb6.jpeg)

![Henri Matisse, Porte-fenêtre à Collioure [Puerta-ventana en Collioure], septiembre-octubre de 1914. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 1983-508.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_340_340/uploads/2025/10/23/68f9f195be3ed.jpeg)
![Barnett Newman, «Not There–Here» [No allí-aquí], 1962. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 1988-1166.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_340_340/uploads/2025/10/23/68f9f1a2a879e.jpeg)
![Daniel Buren, «Peinture aux formes indéfinies» [Pintura de formas indefinidas], mayo de 1966. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 1986-255.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_340_340/uploads/2025/10/23/68f9f1a906019.jpeg)
![Le Corbusier (Charles-Édouard Jeanneret), «Métamorphose du violon» [Metamorfosis del violín], 1920-1952. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 3342 P.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_340_340/uploads/2025/10/23/68f9f1782d2a5.jpeg)
![August Macke, «Lautenspielerin» [Mujer tocando el laúd], 1910. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 4348 P.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_340_340/uploads/2025/10/23/68f9f1b8ac0b7.jpeg)
![Raymond Hains, «Film abstrait» [Filme abstracto], 1952-1976. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 1977-619.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_340_340/uploads/2025/10/23/68f9f1a4a0f47.jpeg)



![Henri Matisse, «Figure décorative sur fond ornemental» [Figura decorativa sobre fondo ornamental], invierno de 1925-1926. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 2149 P.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_354_278/uploads/2025/10/23/68f9f17eae562.jpeg)
![Daniel Buren, «Peinture aux formes indéfinies» [Pintura de formas indefinidas], mayo de 1966. Centre Pompidou, París. Musée national d’art moderne / Centre de création industrielle AM 1986-255.](https://imagenes-mediahub.fundacionlacaixa.org/files/image_354_278/uploads/2025/10/23/68f9f1a906019.jpeg)