
Cómic. Sueños e historia reúne las mejores viñetas del mundo occidental y subraya la doble condición del cómic como herramienta de reflexión sobre el presente y el futuro, y como poderoso medio de creación de realidades paralelas y universos imaginarios.
En la exposición se incluyen 195 obras maestras de la historia del cómic, ejecutadas por autores como Richard Felton Outcault, Winsor McCay, Milton Caniff, Hergé, Alex Raymond, Will Eisner, Jack Kirby, Moebius, Hugo Pratt, Francisco Ibáñez, Max, Miquel Gallardo, Laura Pérez Vernetti, Ana Galvañ, Juanjo Guarnido, Goscinny y Uderzo, Alberto Breccia, Enki Bilal y Robert Crumb.
La directora de CaixaForum Palma, Margarita Pérez-Villegas; el galerista, coleccionista y comisario de la exposición, Bernard Mahé, y el experto en diferentes ámbitos del cómic y asesor de la muestra, Vicent Sanchis, han presentado hoy Cómic. Sueños e historia, una exposición que abraza más de un siglo de historia del cómic occidental como medio de comunicación de masas.

El cómic tiene hoy un alcance comunicativo que difícilmente puede conseguir otro medio de expresión. A pesar de ello, han tenido que pasar décadas para que su valor cultural y artístico haya sido reconocido. De manera progresiva se ha ido consolidando como una forma de expresión, emparentada con otras como la literatura, la pintura o el cine, que ha conquistado a miles de personas en todo el mundo y ha entrado en las salas de exposiciones y en el ámbito académico.

La exposición Cómic. Sueños e historia propone una panorámica muy completa sobre el nacimiento y la evolución de los diferentes tipos de historieta existentes en el mundo occidental, y redescubre su potencial artístico al reunir los mejores cómics de la historia del género en Europa y América. El título de la muestra remite a la doble condición del cómic como herramienta de reflexión sobre el presente y el futuro, y como poderoso medio de creación de realidades paralelas, mundos imaginarios, utopías y distopías.
Desde la prehistoria, el ser humano ha narrado mediante imágenes. La forma de expresión secuencial se remonta a las pinturas rupestres y reaparece una y otra vez a través de los jeroglíficos egipcios, la pintura narrativa medieval o los salterios y libros de horas. La historieta tal como la conocemos, que eclosiona con los medios de impresión masivos durante el siglo XX, presenta elementos formales que la definen, por ejemplo la narración múltiple o un ritmo característico.
Desde que el suizo Rodolphe Töpffer dibujara una serie de divertidas historietas para sus estudiantes a mediados de siglo XIX y, más tarde, autores como Richard Felton Outcault adoptaran como norma el globo de texto, el cómic ha constituido un espejo de la realidad capaz de reflejar los cambios de la sociedad y, sobre todo, los modelos de imaginación. Al mismo tiempo, el cómic ha sido también un incentivo de esos cambios y ha aportado anticipaciones sustantivas, como demuestra en esta exposición la aproximación a la obra de autores como George Herriman, Milton Caniff, Winsor McCay, Alberto Breccia, Jean Giraud (Moebius) o Enki Bilal.
La muestra se completa con primeras ediciones de revistas y libros, así como con reproducciones digitales. Además, también se ha querido que colaborasen en ella destacados autores españoles, que han creado obras expresamente para la muestra. Es el caso de Ana Galvañ, responsable del cartel de la exposición. También destaca el autor mallorquín Max con dos piezas: la portada de Licantropunk y una viñeta de Incident au désert BD.
Esta muestra llega ahora a Palma después de su recorrido por la red de centros CaixaForum de Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia, Zaragoza, Lleida y Tarragona, en los que más de 330.000 personas han podido disfrutar de ella. Cómic, Sueños e historia fascinará tanto al lector erudito —que podrá contemplar centenares de páginas originales de obras seminales— como al neófito, gracias al acercamiento histórico y didáctico al género.
De Moebius a Tintín: las viñetas más
célebres, ahora en Palma
La exposición presenta la obra de los grandes maestros universales y también de clásicos del cómic en España. Arranca con un original y una reproducción de la serie de 1896 The Yellow Kid, de Richard Felton Outcault, considerado el primer cómic moderno, y llega hasta la actualidad con el cómic en línea Joselito, de Marta Altieri, que juega con todas las posibilidades que ofrece el mundo digital, como el concepto de scroll infinito.
Entre estas dos obras, los visitantes podrán disfrutar de 195 originales y una reproducción entre los que destacan decenas de páginas de los dibujantes más célebres de los ámbitos nacional e internacional. La muestra reúne, como no se había hecho nunca hasta ahora, numerosas obras maestras de la historia del cómic que justifican por ellas mismas la visita a la exposición.

Entras ellas, algunos de los cómics o personajes más célebres, como The Yellow Kid, de Richard Felton Outcault; originales de Little Nemo in Slumberland, de Winsor McCay; Terry y los piratas, de Milton Caniff; Tintín, de Hergé; Capitán América y Los Cuatro Fantásticos, de Jack Kirby; Agente secreto X-9 y Flash Gordon, de Alex Raymond; Contrato con Dios, de Will Eisner; diferentes obras de Moebius, y Corto Maltés, de Hugo Pratt.
Cómic. Sueños e historia incluye un montaje escenográfico que hace de la visita una experiencia inmersiva. A cargo del escenógrafo y dramaturgo Ignasi Cristià, reproduce elementos icónicos, como la cama de Little Nemo —el primer gran clásico de la historia del cómic—, que nos abrirá la puerta a un mundo fantástico; una reproducción a gran escala de 13, Rue del Percebe, y un espacio dedicado a Astérix, con sus protagonistas en 3D.
El proyecto nació de la rica colección de Bernard Mahé, una de las más importantes de Europa, y se ha completado con préstamos de numerosas instituciones y de coleccionistas privados, así como también de los propios autores, en el caso del cómic español.
Para acompañar la exposición se ha colaborado con la editorial Flammarion en la publicación de Anatomía del cómic, a cargo de Damien MacDonald, una recopilación histórica que reúne una selección de obras maestras del cómic de Europa y América.

Literatura, música o gastronomía: el cómic más allá de la
exposición
La Fundación ”la Caixa” propone un abanico de actividades innovadoras durante los meses en los que permanecerá la muestra en CaixaForum Palma para que todos los públicos puedan acercarse al arte del cómic desde diferentes perspectivas. El pistoletazo de salida se dará este miércoles con la conferencia inaugural a cargo de Vicent Sanchis, experto en diferentes ámbitos del cómic. También se llevará a cabo el ciclo de conferencias y debates La vida en viñetas: «Cómic+Música», el 29 de mayo, a cargo de Dani Nel·lo, saxofonista, compositor y productor; «Cómic+Gastronomía», el 5 de junio, a cargo de Roger Ortuño, fundador y director de Comer Japonés; «Cómic+Cine», el 12 de junio, a cargo de Desirée de Fez, crítica de cine, periodista y programadora; y el taller «Superhéroes y villanos» para el público familiar, a cargo del reconocido ilustrador Artur Laperla, del 27 al 29 de junio.
Como es habitual, en el marco de la exposición, el centro cultural acogerá visitas guiadas en varios formatos para diferentes públicos y edades, y proyecciones del ciclo Pequeños Cinéfilos. Del cómic al cine. La información ampliada se puede consultar a través de este enlace.
Un paseo por la historia del cómic con ocho
paradas
Distribuida en ocho ámbitos, Cómic. Sueños e historia muestra los inicios de este género, su eclosión con los medios de impresión masivos, el nacimiento y el mito de los superhéroes, la edad de oro del cómic francobelga, la llegada de la modernidad en el eje Italia-Argentina, la explosión del género fantástico y la nueva vanguardia surgida en las últimas décadas. Todo ello, con un especial detenimiento en la evolución del cómic en España.

- La
muestra se inicia con The Yellow Kid,
obra de Richard Felton Outcault. Considerado el autor del primer cómic
moderno, se le atribuye haber sido el primero en utilizar el globo de texto. A
partir de aquí, el primer ámbito de la muestra da un repaso a los orígenes de
la narración secuencial prestando una atención especial a Winsor McCay,
uno de los padres del cómic moderno, autor del clásico Little Nemo in Slumberland. Y finaliza con otros autores centrales
de la experimentación de las primeras décadas, como por ejemplo George Herriman
y su tira Krazy Kat.
- La
edad de oro del cómic norteamericano estuvo marcada por el crac del 29 y el
estallido de la Segunda Guerra Mundial. Durante ese periodo, el cómic viró
hacia la cotidianidad y nacieron algunas series muy populares hasta el día de
hoy. En el segundo ámbito de la exposición encontramos muchos ejemplos, como el
Popeye de Elzie Crisler Segar.
Es en esa época cuando aparece Disney y los cómics de aventuras, entre los
cuales destacan, en este ámbito, El
Príncipe Valiente y Tarzán, de Harold
Foster; o Agente secreto X-9 y Flash Gordon, de Alex Raymond.
Llegamos a un momento fundamental del clasicismo norteamericano con la serie Terry y los piratas, de Milton Caniff, crónica de la Segunda Guerra Mundial que obtuvo gran éxito y que llegó a tener más de 200 millones de lectores. - En
paralelo nace el género de los superhéroes, que debe su gran éxito a la
aparición de un nuevo formato de publicación: el comic book. Superman fue el primero y lo siguieron Batman, Wonder
Woman, el Capitán América. Los superhéroes pasaron por diferentes fases que
definieron su identidad hasta los años ochenta: el desdoblamiento, la doble
identidad y la mutación. En este ámbito se podrán ver páginas originales de la
primera generación de dibujantes de superhéroes, como Jack Kirby o John
Buscema, así como también de autores centrales en la renovación radical de
los superhéroes a partir de los ochenta, como Mike Mignola o Steve Ditko.
- La
historia del cómic en España comienza en el siglo XIX con algunos precursores,
como Apel·les Mestres o Ramón Cilla, y se populariza con revistas como TBO —de la cual sale el nombre que
seguimos usando para referirnos a los cómics: tebeos— y autores como Ricard Opisso, Manuel Gago o Eduardo
Vañó, con su Roberto Alcázar y Pedrín.
A pesar de la brecha que supuso la Guerra Civil Española se siguieron
publicando revistas franquistas, como Flechas
y Pelayos. Durante la dictadura nacieron revistas de aventuras como El Capitán Trueno (Ambrós) o la
gran comedia humana de Bruguera, con Francisco Ibáñez, y las revistas
infantiles que leía toda la población, como TBO.
A partir de los años sesenta, nuevas corrientes y autores, como Enric Sió o Antonio Hernández Palacios, minaron la férrea censura franquista y abrieron el camino tanto al estallido del underground de Max, Miguel Gallardo o Jordi Bernet como al aliento narrativo del formato de la novela gráfica, que culmina en la serie Blacksad, de Juan Díaz Canales y Juanjo Guarnido. - Después
de la Segunda Guerra Mundial triunfaron en Francia y Bélgica las publicaciones
juveniles Gaston Lagaffe, de André
Franquin, y Tintín, de Hergé,
del cual podrán verse en la exposición diferentes piezas enmarcadas y dibujos
originales. En torno a estos autores encontramos diversidad de historietas y
líneas argumentales, desde Los pitufos
hasta Pilote, revista que triunfó
desde su primer número con Astérix,
la mítica serie de René Goscinny y Albert Uderzo. Su presencia es
central en este ámbito, que incluye algunos números originales de la década de
los sesenta y la reproducción a gran escala de una ilustración.
Con el Mayo del 68 se produce una revolución y se consolida un cómic adulto, y también autores como Jean Giraud, presente en este ámbito con varias páginas de Blueberry, que creó antes de revolucionar el mundo del cómic bajo el pseudónimo de Moebius. - La
modernidad floreció en torno al eje Italia-Argentina con autores como Alberto
Breccia, gran renovador desde el punto de vista gráfico. Entre los autores
destacados en este ámbito encontramos también a Guido Crepax. Y con un
pie en cada país, la eterna singladura del Corto
Maltés de Hugo Pratt, presente en la muestra con dos páginas.
- A
partir de los setenta aparecen relatos fantásticos a un lado y otro del Atlántico.
Liberados de la censura y animados por la corriente libertaria del 68, los
autores de cómics se sumergen en una efervescencia creativa y reescriben el
mapa de las relaciones entre el cómic y el resto de las formas expresivas. Esta
sala está dedicada a figuras como Richard Corben, Frank Frazetta,
Jean-Claude Mézières, François Schuiten y, sobre todo, Moebius.
El ámbito se cierra con Enki Bilal, autor fundamental de origen
yugoslavo establecido en Francia que llevó a la máxima expresión la relectura
de la tragedia histórica desde la ciencia ficción más radical.
- El
último ámbito de la exposición abre la puerta a la gran cantidad de caminos que
se han construido en el universo del cómic en los últimos 50 años. Arranca con
la obra Contrato con Dios, de Will
Eisner, que desde 1978 publicó mediante el concepto de novela gráfica. A
partir de los ochenta se renuevan y se diversifican temáticas, formas de
publicación y formatos, con revistas y fanzines como Weirdo y con nombres como Robert Crumb, Charles Burns
o Charles M. Schulz. La exposición finaliza con las nuevas
experimentaciones que abren la vía del cómic ensayo o el cómic expandido,
poéticas performativas, etc.