La pobreza infantil se acentúa y se cronifica en España. Estudio Social N.40
05.06.15
3 minutos de lecturaCon la crisis económica, no solo es mayor el número de niños que caen en la pobreza -en comparación con el total de la población- sino que, además, la probabilidad de permanecer en esta situación es cinco puntos porcentuales más elevada entre la población infantil que entre el conjunto de la población.
Entre los menores, la persistencia en la pobreza es peor: uno de cada cinco niños españoles se encuentra en la pobreza tres años de cuatro estudiados y uno de cada diez vive por debajo del umbral de pobreza todos los años de cuatro posibles.
En 2012 uno de cada diez niños en España vivía por debajo de la línea de pobreza severa del 30%, es decir, que contaban con ingresos equivalentes inferiores al 30% de la mediana, o lo que es lo mismo, vivían con menos de 632 euros al mes en un hogar formado por una pareja con dos hijos.
El porcentaje de niños que en algún momento están afectados por la pobreza es del 44%, si tomamos un período de análisis de cuatro años.
El riesgo de pobreza infantil aumenta de forma lineal con la edad de los niños. Quienes sufren el mayor riesgo de pobreza son los de 14 a 17 años: entre 2004 y 2012, tres de cada diez adolescentes en España vivían por debajo del umbral de pobreza.
También aumenta el riesgo de pobreza cuando los niños viven con un único progenitor (33% si es hijo único y 54% si son tres hermanos), forman parte de una familia numerosa (42% si son tres hermanos y 60% si son cuatro o más) o si son hijos de padre o madre de origen no europeo (50%). Por otra parte, si uno o ambos progenitores están en el paro, esta circunstancia tiene graves consecuencias en el bienestar de los hijos: uno de cada cuatro niños pobres en España tiene ambos progenitores desempleados. Asimismo, si viven en hogares donde solo uno de los progenitores trabaja, presentan un riesgo de pobreza del 34%.
Se analizan varias posibles medidas contra la pobreza infantil: por ejemplo, con una ayuda de 1.000 euros al año por niño condicionada a la renta, destinada a los hogares actualmente pobres, se conseguiría sacar a 400.000 niños de la pobreza. Dicha ayuda representaría aproximadamente el 0,9% del gasto social.
El presente informe concluye que el período de crisis económica ha empeorado y a la vez ha dado mayor visibilidad a la situación de pobreza de numerosos niños, a pesar de que en la etapa de crecimiento anterior a la crisis España ya encabezaba el ranking de países con mayor pobreza infantil de la Unión Europea debido a la falta de políticas familiares y laborales efectivas. Actualmente España es el segundo país con la tasa de pobreza infantil más alta de la UE, solo por detrás de Rumanía.